En Huerta Audición queremos que sepa que los pacientes que siguen un tratamiento con antibióticos aminoglucósidos corren el riesgo de desarrollar problemas de audición, como se ha demostrado en investigaciones centradas en este asunto.

Es importante que se conozca que el uso de antibióticos aminoglucósidos plantea graves riesgos a los pacientes con infecciones bacterianas inflamatorias. Se sabe que estos fármacos dañan las células sensoriales del oído interno que detectan el sonido y el movimiento, a consecuencia de que la inflamación que acompaña a las infecciones bacterianas estimula la absorción del medicamento.

Los antibióticos a los que estamos haciendo referencia son los que se utilizan para tratar la meningitis, enfermedades respiratorias en pacientes con fibrosis quística, y bebés prematuros con infecciones en la unidad de cuidados neonatales.

En el estudio se ha podido determinar que el suministro de aminoglucósidos durante un largo periodo de tiempo pueden volver a la persona que los utiliza sorda. Además, si el sujeto padece una infección que conlleva una respuesta inflamatoria, perderá su capacidad auditiva mucho más rápido.

En Huerta Audición, centro auditivo en Alcázar de San Juan, lo que más nos preocupa es la salud auditiva y, aún más, el grave riesgo de los bebés prematuros, pues son propensos a sufrir estas infecciones. Es alarmante que un niño pierda su capacidad auditiva, ya que el proceso para enseñarle a escuchar y hablar será mucho más duro, interfiriendo en su trayectoria educativa y en su desarrollo social.

La propuesta por Huerta Audición es elegir otro tipo de antibióticos que no afecten de forma perjudicial a la capacidad auditiva, y por ello, gracias a este tipo de estudios se espera que se asienten las bases para mejorar los protocolos de cuidados de la salud que expiden antibióticos aminoglucósidos para los pacientes.

Gracias a todas las investigaciones realizadas, y a la constante innovación de profesionales de la audición como Huerta Audición, las alternativas clínicas irán siendo cada vez más efectivas para tratar las infecciones que puedan poner en peligro la vida del paciente, y con ello su salud auditiva.